Mitos sobre el duelo

mitos sobre el duelo

Cuando perdemos a alguien comúnmente no sabemos que esperar o hacer, debido a que nadie nos ha enseñado sobre el duelo; siendo éste una experiencia emocional, un proceso que incluye síntomas físicos, espirituales, sociales y cognitivos.

Nuestra sociedad continúa manteniendo mitos acerca el duelo, que pueden dificultar nuestro proceso de sanación, por esta razón hoy abordaremos algunos de ellos.

Mito 1: El duelo tiene un orden y tiempo de duración.

Las etapas de duelo han ayudado a la gente a reconocer algunas manifestaciones comunes a una experiencia que no es ordenada ni predecible como a nosotros nos gustaría que fuera; sin embargo, cada persona realiza su duelo de una forma única, por lo que no predecible ni ordenada.

Mito 2: Es mejor alejarse del dolor y del duelo en lugar de ir hacia él.

Hay personas que no se dan permiso para realizar su duelo tras una perdida, ya que nuestra sociedad a menudo anima a la gente a que se aleje del dolor y no a que se haga cargo de él. Mucha gente ve al dolor como algo que se debe superar y no como algo que se debe experimentar. El resultado es que muchos de nosotros pasamos el duelo en soledad.

Mito 3: Las lágrimas son un signo de debilidad.

Nos han enseñado a no llorar en público, a esconder nuestra tristeza, reprimir los sentimientos y mostrando que la tristeza es indeseada y rechazada; Pero para nosotros es una emoción que es imposible evitar.

Las lágrimas están asociadas a la debilidad; sin embargo, son una forma natural de descargar la tensión interna y permite a la persona que está de duelo comunicar su necesidad de ser reconfortado. El llanto hace que la gente descanse tanto emocional como físicamente.

Mito 4: El objetivo es ‘vencer’ tu dolor.

Nunca nos olvidamos de nuestro dolor, pero si podemos llegar a reconciliarnos con él. Creer que la vida va a ser igual que antes de la muerte es irreal. Aprendemos a integrarnos a una nueva realidad, sin la presencia física de la persona fallecida. Con la reconciliación viene la confianza y capacidad de reincorporarse a las actividades. A medida que la reconciliación se va descubriendo, reconocemos que la vida va a ser diferente y que la reconciliación es un proceso, no un resultado. La sensación de pérdida no desaparece completamente, pero si se suaviza, y la angustia intensa causada por el dolor se hace menos frecuente.

Mito 5: El tiempo lo cura todo.

Otra creencia que nos han inculcado, creo que principalmente en busca de un “consuelo ficticio” es que con el paso del tiempo todo se olvida, que el dolor se aleja y nos adaptamos “mágicamente” a la realidad, a la pérdida, pero debemos estar conscientes que esto no es así, cuando enfrentamos la muerte de un ser querido y esperamos que el tiempo lo cure por sí solo, solo estaremos postergando nuestro trabajo de duelo, ya que el sanar nuestro duelo es una tarea y responsabilidad propia, un trabajo complejo y de gran esfuerzo, donde el objetivo es aprender a vivir con una ausencia.

Mito 6: Se fuerte

Una persona que se basa en este principio comúnmente llega a terminar ocultando su dolor, desmoronándose en algún momento o padeciendo de alguna enfermedad, ya que “ser fuerte” es sinónimo de ocultar, evitando entrar en contacto con el dolor, de evadir sentimientos, sin la oportunidad de sanar o comprender lo que la perdida ha traído a nuestra vida, poniéndose una máscara de fuerza, que produce ansiedad, confusión, soledad. Dejemos a un lado las falsas apariencias y atrévete a sentir.

Psic. Lucía Bravo Robles

Cuidados al Final de la Vida y Tanatología